Los despachos para terapias son espacios diseñados específicamente para la realización de sesiones terapéuticas, consultas psicológicas, fisioterapia, coaching, entre otras disciplinas relacionadas con la salud y el bienestar. Estos despachos suelen estar equipados con mobiliario adecuado, como sillas, mesas, camillas y elementos que favorecen un ambiente cómodo y acogedor para los pacientes.
Tipos de despachos para terapias
- Psicología y psicoterapia: Espacios tranquilos que fomentan la confidencialidad y la comodidad.
- Fisioterapia: Equipados con camillas, materiales de rehabilitación y suficiente espacio para realizar ejercicios.
- Coaching y desarrollo personal: Ambientes que promueven la reflexión y el diálogo.
- Terapias alternativas: Espacios para prácticas como la acupuntura, masajes o reiki.
¿Cómo alquilar despachos para terapias?
- Elección del despacho: La elección del despacho para terapias depende de varios factores, como el tipo de terapia que se va a ofrecer, la accesibilidad, el ambiente y las necesidades tanto del terapeuta como de los pacientes.
Las alternativas de despacho para terapias son:
- Consultorio privado: Un espacio dedicado exclusivamente a la terapia, donde se puede crear un ambiente cómodo y seguro para los pacientes. Ideal para terapeutas que desean establecer una práctica independiente.
- Consultorio compartido: Compartir un espacio con otros profesionales de la salud de forma permanente o por horas, puede ser más económico y brinda la oportunidad de colaborar y referir pacientes.
Si nos decantamos por un coworking compartido, obtendremos una serie de ventajas entre las que destacan:
- Flexibilidad: Si pagas por horas, tienes la libertad de elegir la duración de cada sesión según tus necesidades. Esto permite ajustar el tiempo para profundizar en temas específicos o para sesiones más breves si lo prefieres. Si contratas despachos por meses, no tendrás compromiso de permanencia, lo que facilita la posibilidad de empezar y finalizar el contrato según se necesite, sin penalizaciones.
- Control de costes: Los despachos están amueblados y listos para entrar a trabajar, lo que ayuda a gestionar mejor tu presupuesto; ya que no se necesita inversión inicial y solo pagas por el tiempo que realmente necesitas. Esto puede ser especialmente útil si estás en una situación financiera ajustada.
- Sinergias: Los coworking atraen a terapeutas muy capacitados y diversos que prefieren este modelo por su flexibilidad, con los que se pueden crear sinergias de trabajo y ayudar a que las terapias sean más completas.
- Condiciones de alquiler: Asegúrate de entender los términos del contrato, que pueden incluir:
- Duración y condiciones del contrato de alquiler (horas, días, mensual).
- Costos (alquiler fijo, por sesión, etc.).
- Servicios incluidos (internet, servicio de recepción, limpieza).
- Política de cancelaciones y modificaciones.
- Equipamiento: Verifica si el despacho está equipado o si necesitarás llevar tu propio mobiliario y materiales.
- Legalidad: Asegúrate de que el espacio cumpla con las normativas locales.
Esperamos haber puesto algo de luz a vuestras dudas y hacemos hincapié en que siempre será fundamental considerar el tipo de terapia que se va a ofrecer, la población objetiva y las preferencias personales a la hora de elegir el despacho más adecuado.
Si finalmente os decantáis por un despacho compartido, recordad que Aetna Coworking es también un coworking para terapeutas en la Avda. Diagonal de Barcelona y os podemos ofrecer despachos de manera permanente, por horas, con o sin camilla, perfectos tanto para profesionales de la psicología, fisioterapia, coaching como para las terapias naturales.